Tijuana-BC | Isaías Plascencia-CdTj
La Real Academia Española en una de las acepciones dadas a la palabra “cereal” expresa que esa significante hace referencia a un “alimento elaborado con cereales y que suele estar enriquecido con vitaminas y otras sustancias”, además de que los niños lo desayunan con leche.
En ese sentido habría que agregar con base a ese persuasivo diccionario hispano, que no solo cuando se es menor de edad resulta válido y comprensible el consumo de productos elaborados con trigo, máiz o avena y su respectivo toque de azúcar, pues al paso del tiempo, durante la juventud y después en la etapa adulta, no deja de ser un delicioso ritual el llenar un tazón con hojuelas como primer paso, ante de introducirlas a la boca.
El deseo de muchas personas por revivir aquellos años de la infancia en el que la elección de una marca, sabor y hasta serie de personajes no siempre quedaba al alcance o decisión de todos, pero hoy en Tijuana no es ya un impedimento o limitante, pues a través De “Konfleiks Cereal Bar“, es posible dejarse llevar por el recuerdo, la añoranza y la magia de la variedad, así como el libre albedrío.
Lo mejor de este novedoso concepto fronterizo surgido desde la visión de Marco Antonio González Hernández, un joven estudiante de Ciencias de la Comunicación, es que se trata de una experiencia abierta para todos, en el que el “desayuno”, es en la mañana, tarde y noche, desde que abren, hasta que cierran.
¿Cuál elegir?
Con más de 45 variedades de cereales estadounidenses, otro tanto de marcas nacionales, el comensal de cualquier edad, puede elegir la que guste y hasta combinarla con otra, pero ahí no acaba la aventura gustativa, sino que puede bañarlas en leche entera, light o deslactosada, será hasta entonces, cuando el recorrido del sabor no tendrá marcha atrás.
Desde aquella mañana del 29 de septiembre, Marco Antonio y su equipo de colaboradores, además del apoyo firme de su familia, han servido por decenas cada día platones hondos acompañados con experiencias y sorpresas.
Estar dentro y ver tantas opciones, muchas nunca degustadas en casa o tan siquiera consideradas, deja volar la imaginación y con ello un reto, decir al “barista” qué cereal probará, ¿Honey Smacks, Apple Jacks, Trix o Peanut Butter Crunch?.
Es sin dunda una oportunidad única el poder envolverse en esa vivencia que ofrece un abanico de alternativas tanto para quienes disfrutan lo dulce, como quienes cuidan su figura y hasta los que prefieren disfrutar el cereal sin añadiduras.