La discriminación de género es un problema que ha estado a lo largo de los años, es el resultado de los estereotipos que las personas han implementado en otras. La superioridad es un factor de ello, cuando un género se cree mejor que otro (al tener privilegios) hace creer al otro que es inferior, ahí comienza la discriminación.
Este problema también se puede ver reflejado en las familias, en algunos casos los hombres tienen autoridad mayoritaria, por ejemplo en el hogar, se violan los derechos de la mujer (libertad, libre expresión, etc.). Cuando los hijos tienen una orientación sexual diferente, los padres no lo asimilan y llegan a lastimar a los hijos con palabras o acciones hirientes.
También se opta por una desigualdad, esta, puede reflejarse a través de leyes nacionales. Todo esto conlleva a unas extremas consecuencias. Un ejemplo, de consecuencias que ocasiona esta situación, es en el ámbito laboral , ocurre al generarse un ambiente de trabajo hostil y promoviendo el mal trato hacia las mujeres, donde, a pesar de las leyes que se han creado para evitar estas situaciones, aún continúan en la actualidad.
Después de la desigualdad se puede formar la violencia qué puede derivar a través de la vía psicológica, económica, sexual y social. No existe ningún aspecto en la vida de una mujer en la cual no haya manifestado violencia a su alrededor.
Las manifestaciones se han hecho presentes a lo largo de las generaciones, las mujeres han luchado porque la desigualdad y violencia desaparezca y que el gobierno sea igualitario. Expresan cómo la sociedad de hoy reprime a las mujeres de distintas formas, por lo que se han visto obligadas a tener que realizar todo esto, ya que el gobierno promete pero no cumple.