Los países necesitan mejorar las condiciones de trabajo y los ingresos de los trabajadores esenciales para reflejar plenamente su contribución a la sociedad y su importancia en el funcionamiento diario de las economías, revela un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La Organización Panamericana de la Salud cifra en unos 570.000 el número de trabajadores sanitarios infectados. Unas tres cuartas partes de los diagnosticados con la enfermedad son mujeres. Estados Unidos y México suman casi el 85% de todas las muertes por COVID-19 de estos profesionales en la región. El costo humano de la pandemia en América continúa alto con casi 4000 muertes al día.