
A horas de su inauguración, el festival Cine Sin Fronteras llega a Tijuana con una programación internacional que busca posicionar a la ciudad como punto clave para reflexionar sobre movilidad humana.
En entrevista, Leandro Martínez, productor del festival, explicó que esta primera edición se construyó a partir de alianzas regionales y del interés de traer a la frontera un proyecto que combina cine, análisis crítico y trabajo comunitario.
Un festival nacido de la colaboración entre países
Martínez relató que el festival es resultado de un encuentro entre equipos de Argentina, Colombia y México que buscaban unir esfuerzos para fortalecer cine con enfoque social y fronterizo. Añadió que el intercambio permitió desarrollar un proyecto con mayor alcance y con la posibilidad de dialogar directamente con territorios donde la movilidad es cotidiana.
“Nos reunimos, empezamos a pensar cuáles eran las posibilidades, qué aliados teníamos entre los tres festivales y cómo podíamos generar algo que respondiera a lo que está pasando en la región”.
El productor señaló que la unión de festivales permitió integrar obras que abordan migración desde perspectivas críticas, experiencia comunitaria y procesos culturales. Explicó que la colaboración también hizo posible traer a Tijuana actividades académicas, mesas de diálogo y espacios diseñados para acercar el cine a públicos que generalmente no acceden a estos contenidos.
Tijuana como territorio clave para hablar de migración
Durante la entrevista, Martínez destacó que Tijuana fue elegida por su ubicación estratégica y por la fuerza de sus comunidades migrantes. Consideró que la ciudad ofrece un entorno ideal para abrir conversaciones que no solo atraviesan el cine, sino la vida cotidiana de miles de personas que habitan o transitan la frontera.
El productor explicó que desde el inicio se trabajó con organizaciones locales y albergues para definir actividades que fueran respetuosas, pertinentes y cercanas a realidades comunitarias. Afirmó que esto permitió construir un programa que no busca representar a los migrantes desde la victimización, sino desde experiencias narradas con dignidad y diversidad.
“Usemos el Festival Cine Sin Fronteras para excusar este segundo encuentro y para seguir fortaleciendo estas colaboraciones que nos permiten hablar de migración desde donde ocurre”.
Martínez añadió que esta edición busca que Tijuana sea un punto de encuentro para cineastas, investigadores, organizaciones civiles y público general, generando una red de reflexión que continúe más allá de las fechas del evento.
Creación del Pacto Cultural por la Migración Digna
El productor destacó que uno de los objetivos centrales es crear espacios donde las audiencias locales puedan acercarse a producciones internacionales que rara vez llegan a pantallas comerciales. Señaló que, además de las funciones, habrá conversatorios y actividades formativas que pretenden impulsar análisis regional sobre desplazamiento humano.
Martínez confirmó que también se trabajará en la construcción del Pacto Cultural por la Migración Digna, documento que reunirá aportes de participantes de distintos países para definir compromisos éticos alrededor de la representación de movilidad en el cine.
“Invitamos a la gente que se sume a las salas, que lo disfrute y que forme parte de este festival que busca abrir espacios de diálogo en una ciudad donde la frontera se vive todos los días”.
Finalmente, reiteró que el festival se desarrollará en la UABC, el Parque de La Amistad de Playas de Tijuana e incluso en albergues para personas migrantes, esto con el propósito de que la comunidad tijuanense encuentre en cada actividad una oportunidad para reflexionar, participar y reconocerse dentro de su propio territorio.
Conoce toda la programación del festival Cine Sin Fronteras en sus páginas de Facebook e Instagram y en este enlace.













