Durante tres días consecutivos, del 27 al 29 de noviembre, la cuarta edición del seminario internacional «Sentipensares sobre las Migraciones» reunió a colectivos, académicos, artistas y especialistas en movilidad humana para dialogar sobre los desafíos actuales del desplazamiento, las narrativas que lo rodean y las formas de acompañamiento que se construyen desde diferentes territorios.
Las actividades se desarrollaron en la Universidad Autónoma de la Ciudad de México, plantel San Lorenzo Tezonco, y concluyeron en la librería Utópicas de la misma ciudad.
Proyectos internacionales abren el diálogo sobre movilidad humana
En la primera jornada, Fronteras Cruzadas, Corredores Migratorios, Humanizando la Deportación y Narrativas Frontera compartieron sus experiencias de trabajo en Brasil, Colombia, Ecuador, Estados Unidos y México.
Las presentaciones permitieron observar cómo cada organización desarrolla metodologías propias para documentar historias, atender emergencias, acompañar procesos legales y visibilizar violencias que enfrentan las personas en movilidad.
Un punto central fue la importancia de la documentación comunitaria y la producción colaborativa. Las organizaciones explicaron cómo la recopilación de testimonios, fotografías, materiales sonoros y narrativas personales se convierte en una herramienta clave para comprender el impacto emocional, social y territorial del tránsito migratorio.
También se destacó la necesidad de mejorar las articulaciones entre colectivos locales, académicos y redes solidarias presentes en distintos países. El intercambio permitió reconocer que los desplazamientos actuales son cada vez más complejos debido a rutas cambiantes, la intensificación de la vigilancia fronteriza y el aumento de riesgos durante el trayecto.
Frente a ello, los proyectos presentados señalaron que es indispensable fortalecer la comunicación entre comunidades, construir redes transfronterizas y generar espacios donde la migración sea tratada desde la dignidad y los derechos humanos.
Narrativas mediáticas, crisis climática y herramientas digitales para documentar
La segunda jornada se centró en la relación entre migración y medios de comunicación. Una mesa de análisis reunió a especialistas que abordaron cómo las narrativas mediáticas influyen en la percepción pública de la movilidad humana, especialmente cuando reproducen estigmas o discursos que reducen la complejidad de los desplazamientos.
En esta sesión se presentó también un informe sobre el tratamiento informativo de la migración, el cual expone vacíos, omisiones y tendencias que requieren una revisión profunda en el ámbito periodístico.
Ese mismo día se presentó Caminos Sonoros, cortometraje del realizador Jesús Vázquez, que explora la música como refugio emocional durante los procesos migratorios. La pieza indaga cómo los sonidos, los ritmos y la memoria musical acompañan etapas de pérdida, búsqueda, duelo y reconstrucción, especialmente para quienes atraviesan fronteras físicas y simbólicas.
La reflexión se amplió con la participación de Futuros Indígenas, red integrada por comunidades indígenas de distintos países latinoamericanos. Su intervención puso sobre la mesa el vínculo entre desplazamiento forzado interno y cambio climático, destacando casos en los que la degradación ambiental, la escasez de recursos y los eventos climáticos extremos obligan a comunidades enteras a abandonar sus territorios.
La última jornada se llevó a cabo en la librería Utópicas con un taller impartido por Fronteras Cruzadas sobre el uso de herramientas digitales para visibilizar la migración.
Esta capacitación mostró cómo la tecnología puede apoyar procesos de documentación segura, producción audiovisual comunitaria y difusión de historias que normalmente quedan fuera de los medios tradicionales.
El Colegio de la Frontera Norte presentó posteriormente tres cortometrajes creados por migrantes que ahora viven en Tijuana. Estas piezas narran experiencias de llegada, adaptación y arraigo en la frontera, destacando la potencia del cine como forma de expresión y ejercicio de memoria.
El encuentro cerró con una tamaliza que permitió a las y los asistentes continuar el intercambio de aprendizajes, discutir posibilidades de colaboración futura y reflexionar colectivamente sobre el papel que Sentipensares sobre las Migraciones ha asumido como espacio de encuentro, análisis crítico y creación comunitaria.
La convivencia final fortaleció la idea de que los procesos migratorios deben abordarse desde múltiples perspectivas, reconociendo sus dimensiones humanas, territoriales y culturales.
