Si bien se han logrado avances en los años recientes en materia de política pública, proyectos y acciones para la inclusión de personas de talla baja, la activista Martha Elena Santos Arroyo, sostuvo que todavía falta mucho por hacer para que sean tomadas en cuenta en los ámbitos gubernamental, laboral, educativo y social en México.
"La pandemia nos hizo ver y reconocer que no estábamos preparados para responder a los retos que nos trajo", expresó la representante de la Red Mexicana de Personas con Talla Baja, Martha Elena Santos Arroyo al evaluar lo vivido hasta 2020 en México y a nivel mundial como resultado de la pandemia del COVID-19.
En México a pesar de cualquier adversidad, las personas de talla baja han ido ganando terreno en todos los entornos de la vida diaria, desde lo social, hasta lo laboral, sin dejar de lado la parte deportiva, ni el aspecto cultural, aunque falta mucho por avanzar y forjar.
La activista Martha Elena Santos Arroyo fue reelegida para un segundo periodo al frente del Consejo Nacional Gente Pequeña México, por lo que continuará así la gestión y cabildeo de toda acción positiva para avanzar en materia de inclusión e igualdad por los derechos de las personas de talla baja en el país.
Avanzar hacia la inclusión en México, es un asunto que debe ser de competencia general y más cuando se busca la igualdad en derechos para personas con discapacidad y en cualquier escenario en el que al tiempo deba quedar libre de discriminación.
Es la inclusión el escenario ideal y por lo que cada día muchas asociaciones altruistas luchan por alcanzarlo, de ahí la realización en Tepic, Nayarit del octavo Congreso de Personas con Talla Baja, evento que ha dado mayor visibilidad a este sector de la población mexicana.
Este primer encuentro del Grupo Talla Baja Región Baja California, fue convocado y encabezado por la activista social Irene Sánchez, cuyo propósito es forjar una red de colaboración y apoyo entre gente cuya estatura esté por debajo de la altura promedio