
Casas YMCA llamó a las autoridades y a la sociedad civil a crear más programas de atención a personas sin hogar, en especial para los menores migrantes no acompañados que viven en la invisibilidad.
Cifras oficiales lejos de la realidad
La coordinadora general de Casas YMCA, Valeria Ruiz, señaló que el reciente conteo realizado por las autoridades, en el que se reportaron 300 personas sin hogar, no refleja la magnitud del problema.
“Basta con salir a caminar para darse cuenta que el fenómeno es mucho mayor. Basta con ir a visitar los comedores, la Casa de los Pobres, para ver que la población es mucho más amplia”, enfatizó Ruiz.
La organización alertó que la falta de datos reales impide crear políticas efectivas y deja fuera a cientos de personas que no figuran en los registros.
Casas YMCA explicó que este fenómeno no solo ocurre en Tijuana, sino también del otro lado de la frontera, donde existen mayores esfuerzos para documentarlo y atenderlo.
Por ello, pidieron reforzar la colaboración entre organismos de ambos países y visibilizar a quienes hoy sobreviven sin un techo.
Niñas, niños y jóvenes: los invisibles de la calle
Casas YMCA subrayó que muchos menores migrantes no acompañados y jóvenes desplazados no aparecen en los censos porque cambian de lugar constantemente o duermen en casas ajenas.
“Se trata no solo de la gente que está en situación de calle, sino del joven que hoy duerme en el sillón del amigo. Eso ya es estar en situación sin un hogar”, explicó Ruiz.
La organización propone que se realicen encuestas en escuelas y espacios comunitarios para detectar a los menores en riesgo antes de que lleguen a la calle.
Además, buscan sumar al sector privado para financiar becas, talleres y programas deportivos que ofrezcan alternativas seguras a la juventud.
Tijuana, destacó Ruiz, es una ciudad de paso donde muchas infancias enfrentan vulnerabilidades extremas y necesitan atención inmediata.
Casas YMCA pide coordinación y políticas reales
Ruiz afirmó que atender esta situación requiere trabajo conjunto entre gobierno, organizaciones civiles y comunidad.
“La participación del gobierno es desde poder tener servicios sociales accesibles, generar regulación de los costos de vivienda y programas educativos de salud mental y control de adicciones”, señaló.
Agregó que las acciones aisladas no bastan, ya que se necesita una estrategia integral que prevenga que las personas lleguen a vivir en la calle.
Casas YMCA insistió en que detrás de cada persona sin hogar hay un sistema que falló y que se deben fortalecer las políticas públicas desde la prevención.
La organización mantiene alianzas con fundaciones y grupos locales, pero reconoce que el esfuerzo no puede recaer solo en la sociedad civil.
Caminata binacional por la solidaridad
Este martes 4 de noviembre, Casas YMCA realizó la quinta edición de la Caminata de la Solidaridad y la segunda edición binacional junto con organizaciones de San Diego.
El objetivo fue sensibilizar a la comunidad sobre la situación de las personas sin hogar y promover el trabajo conjunto a ambos lados de la frontera.
“Este trabajo binacional busca reconocer que hay problemáticas que se presentan de la misma forma de ambos lados. Aprendemos unos de otros para fortalecer nuestros programas”, indicó Ruiz.
Durante la caminata, las y los participantes visitaron centros de atención a migrantes y espacios comunitarios donde se compartieron experiencias y propuestas.
Casas YMCA reafirmó su compromiso de seguir impulsando acciones que garanticen espacios seguros para niñas, niños y jóvenes en movilidad.













