La educación es un derecho humano fundamental. Para los niños, las niñas y jóvenes atrapados en situaciones de crisis, la educación no solo garantiza la continuidad del aprendizaje, sino que también proporciona un sentido de normalidad y la clave para optar a un futuro diferente, como advierte la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
Casi 1 de cada 4 adolescentes y jóvenes de entre 15 y 19 años no está empleada ni estudia o recibe capacitación, en comparación con 1 de cada 10 niños de la misma edad. Las niñas sufren mayor violencia física y sexual, y un 60% de los países aún discrimina los derechos de las hijas a heredar tierras y bienes.
Un nuevo informe del Fondo de la ONU para la Infancia destaca que el suicidio, la infelicidad, la obesidad y la falta de habilidades sociales y académicas se han convertido en rasgos demasiado comunes de los menores en los países de altos ingresos.
El 24 de agoto arranca el programa “Aprende en casa II” donde los contenidos para los niveles de preescolar, primaria, secundaria y preparatoria podrán ser sintonizados por medio de televisión abierta, estaciones de radio e internet.
La pandemia del coronavirus ha afectado a más de 1500 millones de estudiantes en el mundo y ha exacerbado las desigualdades en la esfera de la educación.
Un programa automatizado de escritura en portugués y una herramienta para detectar la dislexia en español recibirán el Premio UNESCO Rey Hamad Bin Isa Al-Khalifa, que promueve la utilización eficaz y ética de la inteligencia artificial en la educación, así como su acceso universal.
A menos que se implementen medidas decisivas en la próxima década, en 2030 uno de cada seis niños seguirá sin acceso a la escuela y el 40% de los menores no completará la educación secundaria, advierten las proyecciones más recientes de la UNESCO.