La post-pandemia y el cambio climático, entre los desencadenantes de la tormenta perfecta que amenaza a un sector de más de 500 millones de euros. Además, todos los elementos necesarios para producir especies acuáticas se han encarecido con respecto al año pasado, algunos con incrementos nunca vistos.
Se estima que cada año se pierden o abandonan 640.000 toneladas de artes de pesca en los océanos. La matanza de peces y otras especies, como ballenas, delfines, focas y tortugas, algunas de las cuales están en peligro de extinción, es uno de los muchos impactos devastadores de estos aparejos fantasmas.
El atún es un pez que vive en los océanos y tiene un alto valor nutritivo, así como un gran valor económico. Entre el atún y sus especies afines suman alrededor de 40 tipologías presentes en el Atlántico, el océano Índico y el Pacífico, así como en el mar Mediterráneo.
La Conapesca presentará una reestructuración, principalmente, en la vigilancia y generará un censo para saber cuántos permisos hay, cuáles están vigentes y duplicados. “Ahora la entrega de autorizaciones será personalizada, a fin de terminar con intermediarismo y gestores, pues esto contribuía a la corrupción”.
El presidente de la Comisión de Pesca, diputado Maximiliano Ruiz Arias (Morena), señaló que esta actividad se encuentra en una situación “desastrosa”; ya que a nivel mundial, en términos del Producto Interno Bruto (PIB), la participación de México es de alrededor de 7 centésimas, mientras que a nivel nacional es de 0.6 por ciento.
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