Cuando tengo una pérdida y no sé cómo resolverla, tengo sentimientos encontrados, una tristeza infinita, no dan ganas de hacer nada, no se sabe cómo continuar viviendo, se está en un estado de total desesperanza. Una terapia tanatológica puede ayudar a encontrar un cauce a todas estas emociones.
Es una terapia relativamente corta, que ayuda a entender que cada miembro de una familia son personas diferentes, todos sienten de diferente forma, que cada quien tiene un proceso individual, que hay que respetar, sin comparar, pues nadie puede sentir más que otro, sino que cada quien siente y procesa o gestiona emociones variadas, entender las coincidencias y respetar las discrepancias.
Es común que haya en una familia alguien que se hace más fuerte, otro que cree que su dolor es más grande, y siempre se debe respetar cada sentimiento no hay un dolor más fuerte que otro, simplemente es la experiencia, cada persona tiene una percepción propia, por eso es que somos únicos e irrepetibles.
Te tomo de la mano.
Cuando me preguntan que cómo son mis terapias de acompañamiento me gusta contestar tal y como soy, directa, auténtica, respetuosa y con empatía.
En mi consultorio y conferencias trabajo desde tu mundo de ideas y creencias.
Mi labor es irte cambiando de escenario para reestructurar las cuatro columnas sobre las cuales estamos cimentados: mi Yo, mi Familia, mi Sociedad y lo que hago para Vivir.
Este es el método que yo he desarrollado a lo largo de muchos años de estudio y preparación.
Como tú, también la vida me ha lanzado muchas preguntas y pruebas difíciles de superar sin el conocimiento de las etapas del duelo, el cual es absolutamente individual y atemporal.
Llevo veintitrés años dedicada al desarrollo humano y lo que empezó con una pregunta de ¿por qué a mí? se convirtió en un ¿para qué a mí? y en un ¿por qué no?
Apoyada en el método socrático y en un ambiente seguro y acogedor promuevo la catarsis al ayudarte a reflejar, pronunciar y aceptar tus emociones ante una o varias pérdidas por las que estés pasando.
En mi terapia yo no te juzgaré porque no hay decisiones buenas o malas, actuamos y decidimos de acuerdo al contexto que nos toca y en ese momento usamos solo las herramientas que hemos ido adquiriendo de acuerdo al cómo, cuándo, dónde y con quién vivimos, compartimos y crecimos.
Aprendamos a codificarnos y entendernos como seres efímeros con una responsabilidad honorable, la de dejar tu propio sello personal a cambio de muchas sonrisas dibujadas en las personas que significan y validan tu existencia cuando llegue nuestro tiempo de despedirnos llenitos de amor, dignidad, reconocimiento y gratitud.
Laura del Carmen Sánchez
Tanatóloga y Humanista